sábado, 14 de mayo de 2011

LA SUBIDA DEL NIVEL DE AGUA EN ORELLANA PROVOCA GRAVES DAÑOS EN LA NIDIFICACIÓN DE LAS GARZAS

Toda esta zona del embalse de Orellana se encuentra protegida como Zona de Interés Regional (ZIR), Zona Especial Protección para las Aves (ZEPA), Lugar de Interés Comunitario (LIC) y como humedal de importancia internacional del Convenio RAMSAR. 


Según SEO/BirdLife, la colonia de garzas afectada por la subida de las aguas está compuesta por más de mil quinientos nidos de varias especies, entre ellas garcilla bueyera, garceta común, garza real y martinete. Al menos la mitad de los nidos de esta colonia se encuentran ya inundados y en el resto se observan puestas en incubación y pollos, por lo que no se descarta que la subida de las aguas debida a la gestión del embalse haya provocado la pérdida de un número no determinado de puestas de estas especies y amenace con eliminar a toda la colonia. 





En las islas del embalse, ya inundadas por las aguas, en los últimos años se habían observado cientos de nidos de pagaza piconegra, charrancito común y canastera común, entre otras especies. Todas estas especies figuran como protegidas en el Catálogo de Especies Amenazadas de Extremadura, por lo que SEO/BirdLife ha tramitado las correspondientes denuncias ante la situación creada por la gestión del embalse. 



Además la asociación conservacionista indica que el documento del Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del espacio protegido embalse de Orellana y Sierra de Pela en tramitación, establece como uno de sus objetivos específicos ”evitar que los cambios en los niveles de agua del Embalse de Orellana afecten a las poblaciones de fauna y flora existentes en las orillas e islas. Dicho control deberá ser más estricto entre marzo y julio, coincidiendo con la nidificación de las aves en las islas”. 



En relación a esto, el Grupo de Investigación en Biología de la Conservación de la Universidad de Extremadura, como parte de un proyecto de mejora de hábitats en el embalse de Orellana, remitió una serie de recomendaciones para la gestión de la lámina de agua, con el fin de evitar en lo posible efectos negativos sobre las especies protegidas durante la época de reproducción. Este documento fue presentado igualmente a la Junta Rectora de la ZIR embalse de Orellana y Sierra de Pela. 



Informe de la Universidad de Extremadura 
Por todo ello, SEO/BirdLife entiende que la existencia de un informe específico de la Universidad de Extremadura demuestra que se sabía de antemano que determinados aumentos del nivel de cota en esta época del año, podían producir impactos sobre lugares de nidificación de especies catalogadas. 



Sólo sería admisible tal actitud ante necesidades de orden público en la gestión de los embalses de la cuenca del Guadiana, sin embargo, SEO/BirdLife cree que los gestores de Orellana tienen opciones para gestionar las aguas sin causar estos impactos y sin menoscabar el recurso y en este sentido, recuerdan que el embalse situado aguas arriba de Orellana, el García de Sola, se encuentra actualmente al 67% de su capacidad y el del Zujar, conectado con Orellana por un canal reversible, está al 88%. La decisión pues, de mantener Orellana al nivel actual del 96%, con los daños ambientales causados, se podría haber evitado. De ahí que SEO/BirdLife haya denunciado la situación para que depuren responsabilidades.

FUENTE: SEO/BirdLife